La Inteligencia Artificial o IA, es la capacidad que posee un software de poder entender, analizar y tomar de decisiones de forma autónoma. Es decir, que pueda pensar.

Inteligencia Artificial - IA o Artificial Intelligence - AI

Eso suena muy avanzado, pero ¿actualmente existe la Inteligencia Artificial?

Lamentablemente la respuesta es que no existe una Inteligencia Artificial capaz de pensar, se espera que para las próximas décadas sea una realidad, pero actualmente la IA trata sobre la capacidad de las máquinas para hacer tareas complejas.

Actualmente las herramientas y softwares que usan IA en realidad trabajan con Machine Learning o aprendizaje automático. Esto es una serie de algoritmos que pueden tomar la data cruda y «aprender» de ella para la toma de decisiones.Machine learning

El Machine Learning no entiende la información, solo la clasifica y toma decisiones lógicas de su programación.

Algunos de los casos más conocidos de Machine Learning son las asistentes como Siri, OK Google o Alexa.

Cuando la gente escucha los términos Inteligencia Artificial – IA e Internet de las Cosas – Internet of Things (IoT), la mayoría piensa en los avances modernos en un mundo futurista, como los que se han descrito en las franquicias de ciencia ficción o las películas. Muchas de esas predicciones están llegando a buen término en esta cuarta revolución industrial, que actualmente está transformando la forma en que funciona el mundo.

A pesar de que las capacidades completas de la IA y el IoT, aún se encuentran lejos de ser alcanzadas, estas dos prometedoras tecnologías ahora se están combinando en todas las industrias, para proporcionar escenarios en los que la información y la resolución de problemas pueden mejorar los resultados para todos los interesados.

La última gran convergencia de esta magnitud ocurrió a fines de la década de 1990, en la que los teléfonos móviles e Internet, estaban en un camino de colisión que ha cambiado el curso de la historia de manera significativa.IoT

La mayoría de las personas, ahora tienen más poder de cómputo en la palma de su mano de lo que se requería para poner a un hombre en la luna en 1969. La convergencia de IA e IoT está a punto de hacer lo mismo en una escala aún mayor.

El campo de la Inteligencia Artificial ha tenido pasos importantes dentro de la sociedad y seguirá avanzando, un ejemplo de ello es el «Deep Learning», que es el aprendizaje profundo de sistemas, y que se está usando para la tecnología del reconocimiento facial. Sin embargo se le ha dado otro uso más preocupante que es el «Deepfake», unión de de términos “Deep Learning” y “fake” (falso en inglés).Deepfakes

Básicamente consiste sustituir un rostro por otro e imitar gestos y expresiones faciales. Empezó con cambiar el rostro de actrices pornográficas por actrices de Hollywood, hasta crear un falso discurso del ex presidente de Estados Unidos Barack Obama. Y aunque se usa mucho a modo de juego, el «Deepfake» puede ser un arma peligrosa.

Con esta tecnología sería fácil suplantar a cualquier persona, celebridad, líder político, familiares y hacer que digan o hagan cualquier cosa en un video, esto podría tener consecuencias masivas y devastadoras, por lo cual empresas de tecnología están trabajando para identificar los «Deepfake» de forma rápida y acertada.

Echando la vista atrás podemos ver la rápida evolución de la que estamos siendo testigos. Hace diez años había cerca de 500 millones de dispositivos conectados a Internet. Hoy en día, ese número ha crecido entre 10 y 20 mil millones, y para 2020, se estima que habrá entre 40 y 50 mil millones. Con esto podemos decir que la hiperconectividad es una realidad en la sociedad actual, con la gran mayoría de las personas conectadas a internet en todo momento.

Este concepto se engloba en Internet of Things (IoT o Internet de las Cosas), que pretende reflejar la profunda transformación y el radical cambio de paradigma que está experimentando nuestra forma de vivir en hogares, ciudades y entornos de trabajo.